23 de Junio. Noche de San Juan en Ibiza. Qué gran noche.
Hoy es 23 de diciembre. 6 meses después y aún parece que fue
ayer mismo cuando estaba en la playa de Talamanca, rodeada de fuego, magia,
música y sobre todo buena gente.
En estos momentos más emotivos y familiares, se echan mucho
de menos cosas como esta, y personas especiales. En estos momentos previos a la Navidad, a punto de
que llegue la Nochebuena y con ella los atracones típicos de estas fechas,
estar rodeada de gente no te da el calor suficiente que te gustaría.
Está claro que cada uno vive cada momento como mejor le
parece...unos recuerdan a los que se han ido y no volverán y es por ello que
estos días los esperan como una fugaz estrella que pase rápido y apenas refleje
lo que sufren por dentro. Otros piensan en los que están por venir, y esa
sonrisa vale millones aunque la lotería no haya tocado su puerta. Los hay que
sin más, aceptan el nuevo año con más o menos ilusiones, más o menos pereza,
con proyectos o sin ellos, con una lista para las 12 uvas, o pasando de todo. Y
luego estamos los que por voluntad propia estamos lejos, haciendo lo que nos
gusta o trabajando por necesidad, y si, se acepta este hecho, sin embargo
aunque por fuera se está bien, siempre habrá una parte de ti que grite pidiendo
caras conocidas, risas y canciones en esas típicas cenas y comidas, y abrazos
que no necesitan explicaciones.
Es por eso que, a pesar de estar aquí entre montañas nevadas
y ríos que no paran, días fríos y noches solitarias, os deseo una muy FELIZ NAVIDAD, estéis en el rincón del mundo en el que estéis. Mis mejores deseos van
para vosotros, sin necesidad de nombres, y espero que el nuevo año 2015 que ya
está al caer traiga lo que no ha venido con este 2014.
Para algunos, será una nueva oportunidad de mejorar un año
de mierda...para otros, a los cuales nos deja un buen sabor de boca, intentar superarlo
lo máximo posible.
Hay veces que las cosas se ponen difíciles, y parece que
todo se pone negro. Y por mucho que los demás te digan cosas y te intenten
animar, la mente te bloquea de tal manera que no ves salidas. Pero las hay, de
verdad que las hay. Sólo hay que saber encontrarlas, y saber reconocerlas
cuando aparezcan.
Tampoco es fácil hacer lo que uno quiere, y conseguir que
nuestros deseos se cumplan. Seamos realistas...de momento no existen hadas
madrinas que con una varita mágica nos solucionen la vida. Cada uno tiene que
buscarlo y si no lo haces tú, quién lo hará. Da mucha rabia ver cómo gente se
deja la piel intentando aguantar y hacerlo lo mejor posible y por suerte o por
algún extraño juego del azar, nunca salen las cosas bien. Pero no por ello hay
que dejar de intentarlo.
He de reconocer que yo le doy muchas vueltas a las cosas,
tantas que termino mareándolas. Soy cauta con las esperas, las opciones están
en la balanza siempre, pero inevitablemente, la esperanza hace que tienda a
decantarme por la más ventajosa lo cual no significa que sea la más realista.
Pero los que me conocen saben que soy muy cabezota y no desisto así como así.
Con esto quiero decir que quien consigue lo que quiere (siempre que esto esté
en su mano) es porque se ha empeñado en ello y lo ha visto cumplido. Intentar eso
para este nuevo año es un buen intento de cambio que seguro da más sorpresas de
las que uno se imagina.
Y con esto, me despido. No os atragantéis mucho con la
comida, cuidado con el marisco y los cólicos, y el alcohol...bueno, ya sabéis de sobra
que es un amigo al que no hay que dar mucho cariño. Disfrutad mucho estas
fiestas, recargad todas las pilas que podáis que en cuanto llegue Enero yo no
se nunca si la famosa cuesta es hacia arriba o hacia abajo, porque a mi se me
pasa tan rápido el mes como si me tirara por un tobogán. Así que aprovechadlo.
Yo la verdad es que aún no se que me deparan estas fiestas por tierras suizas. ¡Sorpresa!
Un beso desde Göschenen!
FELIZ NAVIDAD!